Si el tiempo no se mantiene quieto ni un momento
si el camino nos acelera el paso para aturdirnos
porque no convertimos el hierro en pluma
la salvia en sangre de viento, y el sueño en sensibilidad,
,
si las palabras son las cárceles del poeta
si con sus barrotes construye puentes suspendidos
porque no llora de espanto a cada noticia
no se le rompe todos los hilos, y luego es capaz de escribirlos,
,
si los vehículos que nos llevan al fin son los mismos
porque nos avergonzamos de no seguir la senda
que otros escriben por nosotros, y no gritamos, gritamos
hasta convertir lo conminatorio en agua que será río
que bajará blanca, que se fundirá en la mar
y allí seremos todos, tiempo que no supimos, tiempo que no pudimos.
Lorenzo Arabí 