No crecer es envejecer

No fui capaz de matar a un niño

cuando tuve ocasión

y la vida me ha devuelto espanto

jugar con las canicas en un manicomio

esperas, doblegarse, tremendos y lutos,

como si me odiase he crecido creyendo.

Soy un Peter pan robando carteras

un sanatorio exprimiendo naranjas

el reguero de años que moja las pantorrillas

y no quiero saberlo, no comprendo

en el absorto anonimato canto,

escupo palabras para ser ignoradas,

aún de este modo consigo transitar

sin alas de cobarde, 

sin piernas de desaparecer,

pero es tan difícil a veces

vencer esta pesadumbre.

A %d blogueros les gusta esto: