Mujeres en el patriarcado espanto de la frontera
acarreando artículos engendrados de ignominia,
todas venidas del maltrato, arrojadas contra las épocas,
resisten bártulos, soportan golpes, se destrozan las vertebras
por chasis vacíos de esta sociedad cruel y violenta,
no se nos cae la cara de vergüenza
y a los que pueden hacer algo
llámense políticos, esos seres ciegos,
como topos peleándose por gusanos,
esta misma noche esperan en la frontera
mañana seguirá ocurriendo lo mismo
la crueldad es tan grande y espantosa
que la cubrimos con palabras
que mienten, y juegos que fragmentan
la conciencia que anda rota,
la luz se apaga
choca repetitivamente
contra la polilla de la esperanza,
los políticos seguirán jugando
a sus cosas,
nosotros aplaudiéndoles,
y la injusticia escondiendo
mujeres bajo la tierra.