Me sentí especial
o me decantaba por el paradigma
o por el susurro del pájaro
que hablando, hablando
escucha el destino,
la guerra había comenzado,
las huestes del cabello blanco
se agarraban a su posición,
mañana despertaré oteando
feliz por haber sido el elegido,
ellos reinaron
pero yo seré la horma
que los paró,
el pájaro habla, habla
escúchale
no le hagas ningún caso,
sentirse especial es tan bueno
que solo su recuerdo
embellece las arrugas de la memoria,
aquella guerra que se me olvida a ratos
está tan cerca que desaparece
por la presbicia del juicio,
mi sonrisa vale más de mil palabras
me arranca lágrimas
me deja andar ensayando discursos
contra ella nadie encuentra remedio,
rompe, rompe el suelo
aunque encuentres el aire impenetrable,
siempre existe un buen agujero
por donde marcharse.
Me di cuenta, no era personal
el paradigma no respeta a nadie
todos fuimos escogidos
yo soy una persona normal.