No sé si es porque me miras a la cara,
prometo seguir la línea recta a tu dictado
y no dejarme vencer por la tradición.
Iré detrás de ti, cruzando avenidas
tiendas de ropa y droguerías,
sombra, luz de mentiras
reina, libido sin opresión,
desharé pasiones y vendas
para ofrecerte lo mejor
de este cuerpo vagabundo
que intenta no volver a sus pasos.
¡Cuánto me aburre vivir lo vivido
y esperar la muerte girando en este artefacto!